noviembre 26, 2007

FILOSOFÍA DE LA EDUCACIÓN


Comentario a la Filosofía de la Educación de Octavi Fullat

OLIVER E. LÓPEZ


Hablar de educación es tema bastante amplio. Hablar de filosofía de la educación lo amplio se vuelve problemático, es decir, si los temas de la educación por sí solos presentan problemas para su comprensión, vista la educación desde la filosofía resulta algo aún más complejo. De entrada, ya los conceptos filosofía y educación son difíciles de comprender, ahora juntos es algo tremendo. Lo interesante es poner las cosas bajo la óptica de la filosofía, entonces el tema de la educación ya no sólo podrá señalarse con el dedo, como lo menciona Fullat, sino que se intentará hablar de una compleja actividad.

Octavi Fullat para esclarecer una definición de lo que es la filosofía de la educación hace primero una extensa aclaración de muchos de los temas que se manejan en este campo, que es el de la filosofía hablando de educación y no la educación haciendo filosofía. Estas aclaraciones van desde los conceptos centrales filosofía y educación, hasta palabras como teoría, diálogo, ciencia, pedagogía, etc.

Sin duda es desde la filosofía desde donde se puede polemizar y aclarar los conceptos que son utilizados en algunas otras ciencias, porque consideramos que la filosofía es crítica, ésta considerada como la herramienta con la que podemos poner en duda todo, por ejemplo una filosofía de la educación no le interesará cómo educar, ni con qué educar, ni en qué medio ni a qué sujeto, sino cuestiones como quién es el educando, qué es la educación y para qué es la educación. Aunque haya quines no concuerden con esta visión acerca de la definición de filosofía me parece que es la más adecuada para entablar un discurso y una relación con la teoría educativa o propiamente, con la educación.

Así pues, Fullat hace un recuento de lo que son los orígenes de la filosofía, para poder luego entablar ese diálogo con la educación. La filosofía que surge como una duda ante lo desconocido, una admiración, una contemplación al entorno del ser humano por él mismo, una búsqueda de la verdad. En estos termino es necesario ahora que la acerquemos a la educación y podamos decir: qué es filosofía de la educación. Fullat establece dos definiciones, la primera que dice que filosofía de la educación es el saber racional y crítico de las condiciones de posibilidad de la realidad experimental educativa en su conjunto. La segunda establece que es un saber crítico que esclarece los conceptos, los enunciados y las argumentaciones que utilizan educadores y pedagogos. Considera el autor que para encontrar una definición omnicomprensiva del tema sería necesario poder juntar las dos definiciones; sin embargo aboga por decir que filosofía de la educación es un cuestionamiento de lo que se hace y se dice en los campos educativo y pedagógico en general, como estos son de y para el hombre, surge entonces una pregunta :¿habrá una antropología de la educación?

Dentro de la filosofía de la educación habrá dos importantes orientaciones: la primera es sobre lo que se dice y la otra sobre lo que se quiere, con esto conjugar los dos primeras definiciones que establecía, poder hablar de un análisis lógico del lenguaje y de una antropología. Entonces se establecerán cinco tareas que contiene la filosofía de la educación.

1.- Análisis de lenguajes. Qué es.
2.- Antropología de la educación, es decir, que el hombre es educación. Para quién.
3.- Teleología de la educación. Para qué el hombre es educado. Para qué
4.- Filosofía de la historia de la educación, es decir, mostrar las constantes y dirección de esta historia. Cuándo.
5.- Una epistemología de la educación, considerar el valor de las ciencias y técnicas educacionales. Cómo.
Podemos ver claramente a lo que se refieren estos cinco puntos dentro de la filosofía de la educación, es decir, que la filosofía de la educación comprende un estudio científico o epistemológico de los mismos términos y saberes, que lo que se quiere saber es esa verdad, que puede ser conocida con un método, plantear ciertas hipótesis y someterlas a la experimentación para darlas como verdaderas o falsas.
Por otro lado es necesario decir que el aprendizaje es algo inherente al hombre, desde el momento que es ese ser busca y se admira, que encuentra, que quiere saber, y hace perdurable sus saberes y los aplica a la cotidianidad de su existencia, por tanto se habla ya de una antropología de la educación. También se está pensando en una finalidad de la educación, o, que la filosofía de la educación debería únicamente ocuparse de los fines o las finalidades de la teoría educativa, claro que es necesario considerar este aspecto aunque no del todo como tal, es decir, que no me parece que le ocupe a esta filosofía solamente las finalidades, porque sería una mera utopía todo lo que se llegara a decir sobre la educación y nunca se “aterrizarían” observaciones críticas a menos de que fueran proyectadas a futuro y sin ninguna garantía de que en la práctica fueran acertadas, se estaría siempre mirando hacía allá, y el aquí quedaría olvidado. Aunque es necesario que siempre una filosofía de la educación se ocupe o por lo menos contemple las finalidades de la educación, es decir, plantear el para qué de la educación, pero no como la única tarea.
Está también el conocimiento de la historia, y sobre todo la historia de la educación o de las teorías educativas, necesario para situar en el contexto correspondiente las observaciones en torno al tema, para aclararlo como algo que esta dentro de un proceso y que no siempre será de la misma forma. Será de mucha utilidad el conocimiento histórico de la educación para establecer criterios de conocimiento acerca de lo que es la educación, conociendo lo que hubo se tiene ya un punto de partida para poder considerar lo presente y lo que vendrá, cómo a cambiado y cómo puede cambiar, qué se ha hecho y qué se puede hacer.
Entendemos pues, que estos temas le conciernen a lo que sería una Filosofía de la Educación partiendo de que ésta es un siempre replantearse los conceptos, las formas, las teorías y las argumentaciones, entendiendo también que la Filosofía de la Educación entre muchas cosas difíciles de precisar, —las que ya mencioné y menciona Fullat,— comprende un análisis lógico del lenguaje, por tanto una crítica.

noviembre 20, 2007

DELIRIO NÚMERO 4887

DELIRIO NÚMERO 4887
Oliver E. López

No les interesa el arte, sino la faramalla en la que han convertido su exhibición, el arte se confunde con el show, y el show una forma de mostrar algo con el fin último del espectáculo, más aún, de raiting, diplomitas, ascensos, fama; además, se usa para mostrarse quienes merodean el arte sin sabérsele acercar. ¡Parásitos del arte, idólatras de la cultura!, sí. Los galeristas, los institutos culturales y demás hiervas que viven a expensas del arte, de exhibirlo, de venderlo y hacer el ritual del show: presentaciones, congresos, cursos, talleres, todo con el único fin de descoporeizar el arte, de descualificarlo y convertirlo en objeto de consumo, en objeto de tiendas Malt. Por otra pate, el ritual del show es un bálsamo para el pueblo, artistas, o mas bien dicho pseudoartistas contentos, igual a pueblo contento, y pueblo contento igual a buen gobierno. Mentira. Los institutos culturales no hacen más que administrar un arte aceptado por las formas criticas del consumo, publicaciones, becas, actividades y demás, qué maravilla. Sin embargo no deja de existir aquél otro arte que dice No, aquél arte que está del otro lado del dinero, de la institución.

Es necesario hacer notar que no se trata de la contracultura, por favor no se piense eso, la contracultura identificada con el arte fue un mal chiste que duró mucho tiempo, la contracultura puede ser el terrorismo y el arte no es terrorismo, que provoque terror es otra cosa diferente, pero hasta ahora no se ha hecho arte desde aquellas formas contra las que se manifiesta el mismo: el genocidio, la barbarie cientista, la guerra, el dominio totalitario, etc.

noviembre 16, 2007

ORÁCULO





ORÁCULO

Olivher E. Lòpez

Pasan con sus autos manchando los días,
sus salarios duraderos, confortables,
vestidos de ropa limpia, ojos de plástico negro.
Llevan en sus bolsos las ocupaciones, exhibirlas.

Miran la banqueta con recelo,
entre las sombras se posan unos besos,
el paisaje de un caminar
que cobra indiferencia en cada vuelta de esquina.
Lágrima que choca sobre el negro pavimento,
hierve.

Pasan con la máscara de la sonrisa
aventando sorbos de hastío.
Flaquean las pisadas,
vapor de lágrima dame otra noche
y soportar el pisoteo.

noviembre 15, 2007

Sin titulo

Por Oliver E. López



Hilo tiembla desde la puerta
ratas de pared

La gata de cine remedia su crisis


Parálisis nocturna

Llantos de palabra la mecánica del tacto al acto de decir

Que las horas se olvidan

Que no se ha gritado nada

Solo chispas de cuento

Manchadas en la nostalgia.



Escapa detrás de la frontera

Donde los ojos son transparentes
Y el cuerpo cansado mantiene la tarde quieta

Brinca las vías


No hay un final

noviembre 06, 2007

VUELO VELO

Vuelo Velo
Por: Oliver E. López



Para Beatriz, por devolverme la poesía que guardaba en sus secretos.






Antes de desempolvar las alas guardadas en el horizonte,
no pueden esperar los labios,
que se caiga la pistola que acaricia mi rostro,
grita ya no estás bala de noche,
porque me gusta sentarme a la orilla de los abismos,
caminar sobre las calles,
orinar entre los autos de madrugada,
olvidar el hambre,
las ventanillas de un camión urbano,
coleccionar conciencias.



No detengo los suspiros con segundos,
beso tu veneno,
porque ya no escribiré más
para las paredes de los sanitarios
sino para que sigas soportando mis desmayos,
espero sentado en el banco de la espera cruzado de sentimientos,
porque asomas el ojo y me guiña el corazón,
porque asomas el ojo y me guiña el corazón,
porque abrazas el alma
y me dejas la ilusión
de tu próximo momento ante mi cadáver.